El modelo chino como inspiración para la economía venezolana: Entre la realidad y la visión simplificada

Venezuela mira hacia el modelo chino, buscando equilibrar el control político con una apertura económica, aunque enfrenta desafíos y limitaciones significativas en su camino hacia la recuperación y el desarrollo.

En 1989, el presidente Carlos Andrés Pérez implementó en Venezuela una serie de reformas económicas basadas en el Consenso de Washington, marcando un rumbo neoliberal en la gestión económica del país. Sin embargo, más de tres décadas después, el gobierno de Nicolás Maduro parece buscar inspiración no en Washington, sino en Pekín.


El modelo chino, caracterizado por una combinación de estricto control político y una apertura económica hacia el sector privado, se ha convertido en una referencia para algunos analistas al evaluar la dirección que está tomando la economía venezolana. Luis Vicente León, presidente de la consultora Datanálisis, señala que la visión simplificada del modelo chino, centrada en la concentración de poder político y la apertura económica, podría ser aplicable a Venezuela, aunque destaca la complejidad del modelo chino actual.


León destaca avances significativos en la relación entre el gobierno venezolano y el sector privado en los años recientes. A diferencia de la estrategia económica de Hugo Chávez, que incluía expropiaciones e intervenciones en empresas privadas, el gobierno de Maduro ha mostrado una relación más fluida con el sector privado y ha entregado empresas anteriormente expropiadas.


El politólogo Ricardo Sucre destaca una diferencia clave entre el modelo chino y la realidad venezolana: la falta de un proceso de planificación estatal en Venezuela. Mientras que China ha dirigido su desarrollo combinando mecanismos del Estado y del mercado, en Venezuela no se observa un proceso de reforma planificado desde el Estado. Aunque se han creado zonas económicas especiales, falta una visión estatal central para dirigir el desarrollo económico.


Sucre sugiere que en Venezuela, a diferencia de China, el gobierno espera que la "mano mágica del mercado" atraiga inversiones automáticamente, sin una planificación estatal central. Aunque reconoce limitaciones como las sanciones impuestas por Estados Unidos, ve posibilidades de crecimiento económico en Venezuela, especialmente atrayendo inversiones de otras fuentes que no sean estadounidenses.


Ambos analistas concuerdan en que la economía venezolana enfrenta desafíos significativos, como las sanciones y las condiciones de infraestructura negativas. A pesar de la flexibilización reciente de las sanciones, Luis Vicente León destaca las "limitaciones brutales" en la capacidad de expansión del sector privado en Venezuela, señalando problemas críticos en infraestructura que aún deben resolverse.


Si bien hay potencial para un crecimiento económico, León advierte que la reconstrucción y desarrollo completo llevarán tiempo, considerando la significativa contracción del PIB venezolano en los últimos años. La economía venezolana se encuentra en un punto de partida bajo, y alcanzar niveles anteriores requerirá un esfuerzo sostenido y estratégico en los próximos años.



Redactado por: Ana Paula Jaramillo



Fuentes: 

Bermúdez, Á. (2024, 8 enero). Venezuela: Cuán viable es que se aplique el modelo económico chino como desea el gobierno de Maduro. BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/articles/cd17kpgxwkgo